Mejor rendimiento con mantenimiento y administración de su flota. Neumáticos el primer factor
18 noviembre, 2021
El mantenimiento y administración de las llantas son aspectos esenciales en el autotransporte considerando estos como el segundo costo más importante de operación en las flotas. Obtener un mejor costo por kilómetro se convierte en el principal objetivo para empresas transportistas que buscan mayor eficiencia, productividad y rentabilidad.
Los beneficios de cumplir con los aspectos mencionados se verán reflejados en una operación más segura, mejores costos operativos, mejor consumo de combustible y un mayor cuidado del medio ambiente.
Es esencial llevar un control de las condiciones y causas por las que se retira una llanta, identificando si cumplió con su vida útil. Por otra parte, las distancias recorridas con cada neumático son datos esenciales a considerar para tomar mejores decisiones en la adquisición y selección de los mismos.
Por lo tanto, el mantenimiento y administración de los neumáticos debe implementarse en las empresas transportistas. De acuerdo con el Consejo Norteamericano para la Eficiencia de la Carga (NACFE) hay cuatro factores principales que propician el desgaste de una llanta como lo son la alineación, montaje, inflado y balanceo.
Es recomendable que se cuente con la alineación correcta conforme a las recomendaciones de la armadora y el peso que se carga, específicamente en los neumáticos direccionales, de tracción y larguero (caster, camber y toe in). El desgaste de hule impacta en la eficiencia de combustible pudiendo dañar algunos componentes de la suspensión.
Cuando se aplica un montaje y no se aplica el lubricante correcto para el montaje, o se monta de manera chueca, en consecuencia, se pellizcará el neumático con el rin, echándose a perder totalmente la llanta.
El inflado es el elemento más importante en el programa de mantenimiento del neumático. De acuerdo con estadísticas, las llantas de tractos y remolques se encuentran por debajo de la presión recomendado por su fabricante. Mantener el correcto inflado evita un mayor desgaste en las llantas y una mayor duración en los cascos, además de reducir el riesgo en fallas de los vehículos y obteniendo una mejor eficiencia en el combustible.
- Verificar el llenado de las llantas es efectuado en su mayoría por los operadores, sin embargo, se ha detectado que no se mantienen los niveles adecuados de éstas, por esta razón la demanda por integrar tecnología para el aseguramiento de presión es cada vez mayor.
- La adopción de soluciones tecnológicas va en crecimiento, los sistemas han implementado mejoras desde el retrofit a través del servicio postventa hasta lo disponible en armadoras para remolques y camiones, aumentando la calidad de la instalación y reduciendo su costo. Actualmente hay sistemas de presión de llantas que permiten una medición directa, lo que ofrecen es comparar la presión de la llanta con una medida preestablecida. Si la llanta se encuentra baja se alerta al equipo de mantenimiento, el operador solo la visualizará en su tablero o a través de una computadora. Por otra parte, otros sistemas ofrecen la función de reinflar el neumático cuando se detecta por debajo del nivel; Informan al operador de la acción, no si se encuentra por debajo de los niveles.
Dentro del balanceo un indicador es la vibración en el volante, alerta principal que indica que las llantas no están bien balanceadas.
Otro dato importante es el renovado de llantas en donde este representa un 18% de ahorro en el costo total de los neumáticos, requiriendo solo un 30% de energía para su fabricación en comparación con una nueva. Dentro de los beneficios además del económico se encuentra la reducción del desecho; Al llevarse a cabo la renovación, el casco no sufre modificación a su estructura, soportando igualmente altas temperaturas de trabajo por lo que el desempeño del kilometraje es el mismo.
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